En primer lugar cabe destacar que los niños no difieren entre la realidad y la ficción y lo que es correcto de lo que no, por ello es importante y necesario que los niños vean la televisión acompañados de adultos para que estos puedan explicar las dudas que surjan, explicar lo que es real y correcto, filtrar programaciones que no sean adecuadas, etc.
Se han dado casos de niños que han querido imitar a sus héroes y se han tirado por las ventanas, entre otros ejemplos. Por esto es muy importante que los niños sepan diferenciar entre lo real y la ficción. Para ello les haremos preguntas del tipo ¿crees que es real?, ¿por qué?, ¿has visto a alguien haciendo eso? ... y después les explicaremos la realidad y las escenas que no entiendan muy bien.
Otras cuestiones que es importante plantearse son:
¿Cuánto tiempo pueden pasar los niños frente a la televisión?
¿Qué tipos de programas son los adecuados?
La respuesta a estas cuestiones vienen muy determinadas por la edad del espectador. Las horas y el tipo de programación deberán elegirse dependiendo de la edad del niño y sobre todo los programas deberán aportar beneficios al desarrollo de los niños/as.
Por ejemplo, no es correcto que los niños más pequeños de la casa vean programas violentos como RAW o Smackdown. Aquí pongo un vídeo de sus consecuencias:
¿Queremos que nuestros niños/as adquieran estas conductas?
Mi sobrino de casi tres años se ha visto muy influenciado por estos programas y ahora la mayoría de las veces juega pegando.
Por ello es muy importante filtrar este tipo de programas como también los que usen un vocabulario obsceno y con contenido para adultos.
Deberán dedicar tiempo a otras actividades como ir al parque, jugar con otros niños y con los padres, realizar actividades extraescolares y deberes del colegio; ya que a pesar de que la televisión les puede proporcionar mucha información también deberán relacionarse con su entorno y adquirir la información que les viene de este.
Un consejo final:
Deberíamos utilizar la televisión como un complemento educativo para la enseñanza y el conocimiento del mundo que les rodea y no como una niñera en la que delegamos la educación ya que estamos cansados cuando llegamos del trabajo y no tenemos ganas de enfrentarnos a nuestros hijos.
La televisión puede ser muy beneficiosa para los niños/as, pero si se usa bien.
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